Cómo convertirse en un profesional exitoso
Cesar Escobar |
1. No hay plan
Todo el mundo hoy está
buscando una receta, una guía, libreto o mapa. Las personas que la sacaron del
estadio no siguieron ningún mapa, lo crearon.
Un mapa nos da seguridad, pero
por ellos, sacrificamos oportunidades.
La propia vida es un libreto
(Estudie, trabaje (así no le guste), cases, tenga, endéudese, procree,
jubílese). Este libreto nunca asegura nuestro éxito, ni nuestra felicidad.
El éxito es la obtención de
metas con propósito. Todos nos establecemos metas diferentes, dándonos un
estándar diferente del éxito. Cuando no nos ponemos metas, nos dejamos llevar
por el concepto comercial del éxito, camino directo a la frustración.
No hay plan, no sabemos cómo
vamos a llegar. Podemos establecer el “que” y tratar de adivinar el “como”,
pero este último nunca lo sabremos.
No hay plan, no sabemos cómo
nuestra vida se va a configurar. No importa si las cosas salen exactamente como
las habíamos planeado. Tenemos el poder de establecer el norte. La vida nos
puede sacar de rumbo, pero siempre podemos re-enrutarnos y coger un camino
diferente para el destino.
2. Concéntrese en fortalezas, no en
debilidades
Desde pequeños nos han
enseñado a trabajar en nuestras debilidades. Si en el colegio éramos malos en
algo, nos hacían dedicarle más tiempo. Es decir, cuando usted es malo en algo,
debe invertirle más tiempo.
Es lo más contrario a la
naturaleza posible. Si uno es malo en algo es un claro indicador que debería
dedicarse a otra cosa. Por eso es simple, capitalice en lo que es bueno y
dedíquele el menor tiempo posible a sus debilidades.
3. No es acerca de usted
Busque su pasión, concéntrese
en sus fortalezas. Sin embargo, siempre tenga claro el “¿Para quién?”. Nosotros
vivimos en una sociedad funcional. Recuerde que nosotros estamos para servir a
los otros. No es acerca de usted, es acerca de la gente a su alrededor. Es
acerca de la sociedad.
La grandeza viene de
engrandecer a otros. Las personas que son grandes saben que son grandes, por
eso no necesitan mostrarlo. Se dedican a ayudar a otros a lograr esa grandeza.
Los pequeños, son aquellos envidiosos que buscan resaltar al tumbar a los
otros.
Siempre que haga algo, no
piense solo en usted, piense en las personas a su alrededor.
4. Perseverancia siempre le gana al talento
La gente cree que el talento
es lo único que importa a la hora de conseguir el éxito. Si afecta, sin
embargo, no es tan determinante como lo es la perseverancia.
El talento es algo común. Hay
mucha gente con talento, sin embargo, cuando el momento de la verdad llega.
Cuando la gente debe esforzarse, sacrificar y aguantar el rechazo o el fracaso,
muchos caen.
La perseverancia que tiene una
persona determina su éxito. Si es capaz de desarrollar resiliencia y aguantar
los diferentes embates de la vida, en algún momento, tarde o temprano, llegara
a obtener el éxito que quiere.
5. Cometa excelentes errores
El miedo al fracaso nos paraliza.
La zona de confort no amarra y por eso nos da miedo salir de ahí. No
arriesgamos, por eso nos estancamos. Es más, nos enseñan que lo peor que le
puede pasar es fracasar.
Lo que no nos dicen es que el
fracaso es natural y hace parte integral de la vida. El fracaso es necesario y
bienvenido, ya que nos acerca cada vez más al éxito. Es la forma más sencilla
que tenemos de aprender.
Por eso, al iniciar un
proyecto, salir a buscar un propósito o hacer algo, salir sin miedo de
fracasar. Si la embarramos, que sea grande, ya que así será la lección.
6. Deje huella
Siempre quedan las preguntas
¿Importo que estuviera acá?
¿Mi existencia genero alguna
diferencia?
¿Deje huella?
Por eso, al vivir la vida, es
importante pensar en el legado. En cómo queremos ser recordados y lo que
estamos haciendo para que sea así.
Fuente: Mabel Rocio Castillo Pineda